Dead Snow (2009) llegó directo a las estanterías de los videoclubes mexicanos sin ver una corrida comercial en las salas de cine, lo que ya no es de extrañarse. Sobre ella, había escuchado que era algo así como la versión noruega de Evil Dead (1981), que era heredera de las primeras películas de Peter Jackson y que además, venía a refrescar el mundo de los zombies. Pues la realidad, es que ni muy muy, ni tan tan, porque la primera mitad no cuenta más allá de que, unos amigos se van a pasar las vacaciones a una solitaria cabaña en las montañas (¡Que manía de pasar incomodidades!), para que lo más divertido se presente en los minutos finales, eso sí con mucho gore y humor negro cortesía de unos zombies nazis que reclaman un viejo tesoro ¿Qué no eran piratas? ¡Ah! No perdón, es que el asunto remite inevitablemente a La niebla (1980), película de John Carpenter que bien pudo ser fuente de inspiración para el director Tommy Wirkola, aunque entre ambas no hay ni punto de comparación.
El hecho es que, cinco años después llega la secuela, la cual por lo menos en el trailer deja entrever que tendrá más salpicadero de sangre y destripados que su antecesora, muchísimo más bromas de mal gusto no aptas para estómagos sensibles y, por momentos una comicidad del más puro estilo Shaun of the dead (2004). Si el trailer no resulta ser una tomadura de pelo en donde se nos muestran solo los últimos cinco minutos, creo que ésta segunda entrega puede hacer pasar un buen rato a los fanáticos de los muertos vivientes.
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